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Scalabrini Ortiz, Raúl. Bases para la reconstrucción nacional.

Buenos Aires: Plus Ultra, 1965.

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 Prólogo de Vicente Trípoli. Aquí se aprende a defender a la patria. BANCO CENTRAL El artículo 40 es bastión de la República. Carta abierta al embajador británico. La fuerza debe estar al servicio de una finalidad nacional. La batalla de la soberanía. Hacia la reconstrucción de la antigua estructura colonial. Como se maneja la economía argentina por control remoto. Bajar el nivel de vida paa forzar la exportación. La Iglesia no condena el patriotismo. El enemigo nos aconseja desmantelar nuestra defensa. Terminar con las querellas. Importaciones de enero a agosto de 1956. Frente a pugnas ajenas, afirmar el ser nacional. El Banco Central es el rey del país. Sueñan con liberar la economía argentina de la intromisión de los argentinos. Hace 20 años un lúcido marino dio un alerta. La complicidad del silencio, arma de dominación británica. El paralelo 42, una frontera antiargentina. Primero, economías distintas; más tarde, segregación. Segregaciones que achicaron a la patria. El daño que hacen sobrevive a los ministros. El pueblo declarará nulo todo lo que se resuelva a sus espaldas. Si la libertad económica no alcanza para todos, la queremos para nosotros. La evolución del hombre reconoce un pasado gorila y un futuro industrial. Frente al poder económico extranjero conservemos nuestra fuerza política. Un poco de luz sobre las espoletas y el petróleo de la revolución. Bunge y Born tiene su propia manera de entender la libertad. Movámonos entre las grandes potencias, sin ceder un paso en nuestras reivindicaciones. Otra vez el capital extranjero presentado como mágico curálotodo. Para dominar un país ya no hace falta someterlo militarmente, bastan oportunos empréstitos y concesiones. ¿Hacia otra brutal desvalorización del peso? En un país empobrecido, los grandes diarios son órganos de dominio capitalista. Mientras los rusos construyen un gran país, nosotros seguimos atrapados en las mallas del colonialismo. No es culpa nuestra si las primeras invasiones inglesas tuvieron más color que estas de ahora. Los signos son los mismos: como en 1938, la patria renuncia a que sus hijos la defiendan. Esos aviones yanquis no vinieron a divertirnos. Táctica de penetración: dar participación a los rivales para asegurar sus propios objetivos. Si seguimos así, los hombres de armas cuidarán una soberanía inexistente. Como un hombe devorado por la fiebre, también el país necesita extirpar sus bacilos y restablecer la armonía de los órganos. Todavía quedan seis peligrosas semanas. Esta vez la violencia británica tuvo la virtud de unir al pueblo contra ella. Neutral ante el mundo, la muchedumbre argentina madura el espíritu nacional. La oligarquía porteña contra la nación y el pueblo.
RAUL PREBISCH El gato es mal guardián de las sardinas. Señor Presidente: no firme Ud.nada. ¡Esto parece cosa de magia negra!. Pretextos para entregarnos al extranjero. La crisis imaginaria del doctor Raúl Prebisch. El número símbolo de nuestra incapacidad. No polemizan por el interés del país, sino por conveniencias extranjeras. El "britanilismo", brújula de Prebisch. Basta consultar a F.Pinedo, R.Prebisch y A.Hueyo para saber lo que no debe hacerse. Detrás del asesor económico está el mismísimo John Bull. Protección para ellos sí; para la industria argentina, no. Para cirsis inventadas, soluciones antinacionales. El país es una gigantesca empresa amenazada por la quiebra. FERROCARRILES Nos quieren hurtar los ferrocarriles. Un desagravio a nuestros ferroviarios. Una aclaración sobre el déficit ferroviario. Un paso para que los ingleses vuelvan a recuperar nuestros ferrocarriles. Los ferrocarriles "ingleses" hicieron su capital con el esfuerzo de los argentinos. Hora feliz, sí: envuelta en hierro viejo compramos soberanía. ¿No estaremos todavía en 1937?. Sin considerar el plan británico de ocupación no pueden comprenderse los sucesos argentinos. Con las mismas triquiñuelas de ahora en el 90 malvendieron el Ferrocarril Oeste. De cómo un asesor hipotecó la economía de la República de Otaria Los ferrocarriles argentinos, otra vez en peligro. Los ferrocarriles deben servir al país, aunque no den ganancia. Hace diez años los ferrocarriles argentinos nos devolvieron el derecho a desarrollarnos como Nación. PETROLEO, CADE Y VARIOS Sombra augusta de don Lisandro de la Torre. Un plan maestro contra el desarrollo argentino. Defensa retrospectiva de una coima de un millón de libras. Mirémonos en el espejo de Egipto. ¿Libertad para quién?. Se cumple el plan de...desmantelamiento económico. Con tal embajador argentino en Washington los ingleses pueden dormir tranquilos. La función sigue adelante: el domador marca los pasos de la entrega. Si no lo puede hacer el Imperio tratará que otros lo hagan por él. Gran Bretaña quiere que la Constituyente convalide cinco decretos Eisenhower señala los peligros de una penetración económica. Con el endeudamiento progresivo de las empresas del Estado, preparan una entrega al capital extranjero. El misterio de la CADE. No es el autoabastecimiento lo que les urge, sino la entrega del petróleo. El verdadero capital que necesitamos es la movilización de la iniciativa y el trabajo argentinos. Aramburu y Rojas son degradados por nuestro director.